La obligación de emitir facturas electrónicas entró en vigor en 2021 para los contratos públicos y las grandes empresas. Las demás, es decir, las pequeñas y medianas empresas, han visto cómo dicha obligación se ha ido aplazando año tras año.
De este modo, las facturas en formato PDF sin firma digital seguirán siendo válidas a efectos legales hasta el 31 de diciembre de 2026.